Al nuevo gobierno municipal

Puedo afirmar que Nuevo Laredo necesita urgentemente un modo riguroso de mantenimiento y modernización. Basta con circular por las calles para darse cuenta de ello.

A lo que alcanzo a ver, no me queda duda de que la segunda parte de la administración anterior dejó bastante que desear y, por ende, bastante área de urgencia y oportunidad. La situación era tal que antes del 6 de junio cualquiera de las acciones del futuro gobierno (independientemente del partido) sería de beneficio para la ciudadanía.

Ahora bien, como tampoco es un secreto, antes del día de la elección e incluso sus días y semanas posteriores, Nuevo Laredo se vio a sí mismo seriamente dividido.

Aunque a mi modo de ver es positivo que tantas y tantas personas se interesen en política, sí que es de preocupar que la división que se generó en ocasiones llegó a manifestarse en actos de inmadurez y, por su puesto, de “juego sucio”.

En otras palabras, la política, que es preciosa, llegó a denigrarse para convertirse en desagradable y dañina politiquería: entre los militantes, los nuevos-militantes, los medios de comunicación locales, el manejo de la información y de la falsa información.

Como es evidente, los partidos y sus altos simpatizantes son ampliamente responsables de esta situación que cristalizó en los resultados del proceso electoral del pasado mes de junio: yo mismo, como funcionario de casilla, además de lidiar con el INE y el IETAM, conté y reconté los votos y por ello soy testigo de los resultados de una ciudad con una clara división.

Ahora bien, como es sabido, esto no terminó allí, sino que pronunciándose más claramente como conflicto continuó por una intensa semana y luego por meses.

Aun con todo, este proceso electoral fue el que los llevó a ustedes, presididos por la respetable señora Carmen Lilia Cantú Rosas, a llegar a la gran responsabilidad de administrar los recursos de este municipio. Tarea que, seguramente, no será fácil… pues el panorama no es fácil.

Es por todos conocido que los cambios de partido en el gobierno tradicionalmente llevan consigo algunas “tablas” para hacer tropezar al gobierno entrante. Por tanto, a ustedes les toca enfrentar los retos que les dejan, pero sin pasar por alto ningún tipo de injusticia.

Es decir, sin caer en lo mediático y, como dice el Presidente, sin “caer en provocaciones” o apostar por la venganza, es necesario que ustedes asuman con honestidad las situaciones municipales y de haber algo grave presentarlo a la autoridad competente para que se investigue, y si es el caso, se castigue.

Creo que nadie puede oponerse a que si existen situaciones irregulares y desafortunadamente corruptas hay que combatirlas con el rigor de la justicia y no solo con titulares en los periódicos.

Caer en lo mediático, hacer politiquería, solo aumenta irresponsablemente la división de la ciudad: Nuevo Laredo no necesita estar más dividido. Nuevo Laredo ya ha tenido bastante “grilla política”.

Si ustedes asumen seriamente la tarea de gobernar más allá de los colores y de trabajar más allá de cualquier compadrazgo, estoy convencido de que su administración será la que esta ciudad necesita.

Si se dejan de lado las politiquerías y se asume el presente con valentía seguro estoy de que su gobierno, que afortunadamente es presidido por una mujer firme, podrá apostar por el auténtico desarrollo para nuestra ciudad, que supera por mucho al mero asistencialismo que, en efecto, tiene a la gente contenta y votando pero que no les impulsa a superarse.

Si queremos un Nuevo Laredo con desarrollo habrá que apostar más a la educación, al trabajo y a la salud, pues son clave para que todos los ciudadanos puedan dar pasos por sí mismos para dignificar a sus familias.

Respetables funcionarios del nuevo gobierno municipal: hoy la ciudad necesita de hombres y mujeres que trabajen bien para darle un nuevo rumbo a la ciudad y para esto es preciso superar la lógica del “ahora yo estoy arriba”.

Soy consciente de que ha sido un proceso complejo y largo, sin embargo, por las acciones y pasos que ya ha dado la hoy presidenta municipal dentro y fuera de esta frontera y por el modo de seleccionar y hacer su particularmente variado equipo, estoy convencido de que estarán a la altura de las circunstancias para hacer de Nuevo Laredo una ciudad que esté y se vea mejor pero, sobre todo, una ciudad con más desarrollo.

Hoy es el tiempo urgentemente ideal para la cordura, la madurez y el respeto.

Felicidades, Sra. Carmen Lilia: ¡Qué Dios le ayude a ser y a hacer una buena y sana política!

Luis Donaldo Gonzalez

05 de octubre de 2021