Migrantes, patadas y odio

El domingo 29 de septiembre se viralizó un video que muestra un serio y peligroso conflicto entre migrantes, elementos de la Guardia Nacional y agentes del Instituto Nacional de Migración [INAMI] en Tapachula, Chiapas.

Las imágenes dejan ver que llueven piedras y gritos. A su vez, se puede ver que los elementos de la Guardia están preparados con protección adecuada: cascos, chalecos y escudos de buen tamaño. En la escena también aparecen dos agentes del INAMI sin protección… aun en medio del conflicto, aun y cuando la Guardia está bien preparada -es decir, cero improvisada-.

Lo más llamativo de todo es la acción de los últimos dos agentes: patean en el rostro a un hombre del grupo de migrantes.

El mismo domingo, después de viralizarse el video, el INAIM reconoció lo sucedido, lo catalogó como “conducta inapropiada”, aunque también, sin embargo, lo explicó como un acto de defensa propia: “una persona migrante empezó a golpear a un agente federal de migración, por lo que dos elementos más acudieron en su auxilio”.

Solo los que estaban presentes podrán decirnos qué fue lo que sucedió, pero aun con las explicaciones oficiales no podemos negar que lo que se ve en el video es un acto de saña o, incluso, de odio.

Este terrible acto también deja ver un modo de entender y pensar la migración de muchos mexicanos (irónicamente: los mexicanos exigimos un trato digno para nuestros connacionales en EE.UU.).

¿Por qué este tema es tan importante? Sencillamente porque el tema de la migración, aunque ha estado presente desde los inicios de la historia de la humanidad, hoy es el tema del siglo. Es un tema presente en América, pero también Europa y Asia.

Es un tema doloroso porque detrás de él no solo hay personas que buscan “una vida más cómoda”. No.

Detrás de la migración se esconden muchas personas (a veces familias) que tienen que salir de su hogar buscando qué comer, y, en casos más extremos y dolorosos, que buscan huir de las mafias o de la inseguridad de un pueblo en donde constantemente se ven amenazados de muerte.

Por eso, ante la migración tenemos que evitar las generalizaciones y el rechazo por el rechazo. Tenemos que evitar el egoísmo y la indiferencia.

Como antes dije, la migración es el tema de hoy y por lo mismo tenemos que buscar el modo de enfrentarlo: puede ser un área de oportunidad para construir puentes culturales o puede ser ocasión para expresar el nefasto odio “aparentemente justificado” que a veces nos invade.

Aunque el INAMI separó de su cargo a los involucrados, tengo que decir que la historia no termina aquí: ni siquiera podemos saber cuántos actos como este suceden porque no quedan grabados y viralizados en video.

Puesto a mayor escala: si no tenemos un dato claro de cuantas violaciones a los derechos humanos se hacen a los mexicanos dentro de México… mucho menos tendremos una idea de cuanto abuso soportan los migrantes en México pues, al parecer, por ellos no hay quien de la cara.

Constitución política de los Estados unidos Mexicanos, Artículo 11:

“Toda persona tiene derecho para entrar en la República, salir de ella, viajar por su territorio y mudar de residencia, sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte, salvoconducto u otros requisitos semejantes. El ejercicio de este derecho estará subordinado a las facultades de la autoridad judicial, en los casos de responsabilidad criminal o civil, y a las de la autoridad administrativa, por lo que toca a las limitaciones que impongan las leyes sobre emigración, inmigración y salubridad general de la República, o sobre extranjeros perniciosos residentes en el país.

Toda persona tiene derecho a buscar y recibir asilo. El reconocimiento de la condición de refugiado y el otorgamiento de asilo político, se realizarán de conformidad con los tratados internacionales. La ley regulará sus procedencias y excepciones”.