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¿Vocación o profesión por el volante?
El día de hoy tratamos un tema que en la economía y en el comercio exterior es parte fundamental para su desarrollo y crecimiento, y son pieza necesaria en el ámbito del autotransporte, y me refiero a los operadores, esta profesión tan señalada e insultada a lo largo del tiempo por la sociedad la cual pierde de vista que son parte fundamental para nuestro diario vivir, y en estos tiempos de pandemia, hasta de subsistir.
En lo que se refiere al mundo del autotransporte, se esta pasando por un déficit de operadores o choferes como coloquialmente se les dice, y esto forma parte de un crecimiento exponencial en el comercio mundial, han sido una gran cantidad de unidades las cuales han sido habilitadas para transportar mercancía, pero desgraciadamente se ha visto copada por esta situación que lejos de ser problema económico o demográfico, es más bien un problema social.
Derivada de la imagen tan denigrante y de los constantes ataques sin fundamento que la sociedad le da al operador de tractocamión, es el factor más predominante que causa que hagan falta miles de operadores a nivel nacional. Para algunos que ya ejercen esta labor, ha sido el último recurso para llevar pan a sus casas, y no por lo simple que sea el oficio, si no por el constante señalamiento como si este fuera algo malo, como si fuera casi un delincuente o si tuviera algo de desastroso para el núcleo familiar. Conozco muchos profesionistas que han dejado el escritorio y las comodidades de una oficina por dedicarse al volante, y en todos y cada uno de los casos no es por otra situación que la económica, algunos ven con buenos ojos este cambio, y algunos otros lo ven como tocar fondo, como si hablara de ser algo negativo.
Cuantas veces no hemos escuchado la frase “comes como trailero” y “hablas como si fueras trailero” refiriéndose como si no hubiera cosa más ruin que ser maestro del volante, que lejos de ser parte importante de una actividad económica, se les refiere a ellos y ellas como “personas de segunda”, y no es así, estas personas son padres, son hermanos, son hijos y son hijas, son madres, son aquellos que con esfuerzo y dedicación entregan su servicio para el bien de los demás. Y así, de esta manera, desde temprana edad para muchos sale del radar el desarrollar esta vocación por ser operador de unidades pesadas, cuando la mayoría no sabe ni siquiera de lo que se trata realmente, porque es muy fácil señalar lo que no se conoce.
Tenemos la obligación de dignificar el autotransporte, sobre todo el capital humano, ese que tantas veces señalamos, que tanto cuesta ver como algo positivo, que la óptica de algunos es verlos como “los de abajo”. Dejemos de señalar, dejemos de juzgar, dejemos de “criminalizar” esta noble profesión, esto es tarea de todos, que si bien les recuerdo a algunos que este pueblo vive por gran porcentaje del autotransporte, y de el dependemos para que nuestra ciudad siga pujante económicamente.
Desde esta trinchera digital, mi reconocimiento para las mujeres y hombres que ejercen esta labor tan pesada, de poco sueño y de malos tratos, pero eso sí, muy digna y de respeto.