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México debe aprovechar mejores prácticas en seguridad vial
De manera reciente la National Transportation Safety Board (NTSB) de Estados Unidos publicó un listado de los elementos para mejorar la seguridad vial en el transporte, donde se considera los diversos modos con ejes de acción para cada uno.
En el caso de los modos de transporte terrestre, tanto particular como comercial, el NTSB identificó 5 líneas de acciones para enfocar el trabajo durante 2021 y 2022, entre los que se encuentran:
- Eliminar la conducción distraída.
- Implementar una estrategia integral para eliminar los choques relacionados con el exceso de velocidad.
- Prevenir la conducción bajo los efectos del alcohol y otras drogas.
- Proteger a los usuarios vulnerables de la carretera a través de un enfoque sistémico.
- Exigir tecnologías de vehículos conectados y prevención de colisiones en todos los vehículos.
En la perspectiva de Salvador Saavedra, presidente del Ramo 105 del Sector de la Industria Automotriz de Canacintra, se deben aprovechar las mejores prácticas que se desarrollan a nivel internacional, comenzando por tener una agencia que emita estos lineamientos, y posteriormente por tener un ente responsable de la gestión de la seguridad vial.
“La NTBS emite un análisis de los accidentes de todos los modos de transporte, y emite un previo sobre ese suceso y un informe final que puede ser factor para determinar las acciones a emprender”, describió Saavedra.
Uno de los elementos en los que se enfoca esta guía del NTSB es reducir los distractores en la conducción, yendo a temas como prohibir el uso de manos libre, no sólo del empleo de dispositivos móviles, esto por la distracción que puede generar en la conducción.
Otro factor que se comienza a considerar es emplear tecnología para identificar los distractores, en donde se puede sumar incluso el fumar, como un elemento que detone riesgos a la seguridad vial.
“El factor es cómo lograrlo en automóviles particulares, las flotas no sólo en Estados Unidos, sino en México, ya están trabajando e implementando herramientas para evitar la distracción al conducir”, agregó Saavedra.
El especialista destacó como uno de los principales ejes, el reto de limitar la velocidad de los vehículos, de nueva cuenta, en su aplicación a los automóviles particulares, pues en las flotas existen procesos para su ejecución.
Respecto a los vehículos conectados, este eje está enfocado a cómo evitar las colisiones, a través de la comunicación vehículo – vehículo o vehículo – infraestructura, “lo que se busca es aprovechar las tecnologías disponibles para reducir los impactos de la colisión”, abundó.
Con base en lo expresado por Saavedra, este tipo de implementaciones parten del compromiso de los fabricantes de vehículos ligeros en Estados Unidos ante la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), en donde para 2022 los automóviles tengan un sistema de asistencia de frenado de emergencia, por lo cual la mayor parte de las unidades en el mercado ya tiene este tipo de dispositivos.
“Este tipo de situaciones son las que deben aprenderse en México, en donde debemos comenzar por la autoridad que se haga responsable del tema, hay instancias que tienen atribuciones para regular, pero no para responsabilizarse”, aseveró Salvador Saavedra.
Un factor que incorpora la guía del NTBS es el uso de alcohol o drogas al momento de conducir, sobre todo, ante la aprobación en diversos estados de la Unión Americana del uso de mariguana como uso lúdico, y en donde se está buscando evitar el que conduzcan bajo esos influjos.
Para México, consideró Saavedra, ante la aprobación que se ha dado en el Congreso sobre el mismo tema, se debería comenzar a realizar el mismo análisis.