Inteligencia emocional y Música

Indudablemente mi vida cambio desde el momento en que mi madre me obligo a tomar clases de guitarra, lo que me llevo a tomar el bajo eléctrico unos años después.

¿Ese cambio tan positivo solo por tocar 3 tonos en una rondalla o el bajo en una banda heavy metal?

Les contare un poco sobre mi experiencia:

Mi primer acercamiento formal con un instrumento fue un curso intensivo de un mes que hice en la casa de la cultura, aun recuerdo vívidamente el evento de clausura ya se imaginaran por que, las reacciones físicas como emocionales que sentí previo a la presentación nunca las había experimentado y al finalizar de nuevo mi cuerpo empezó a reaccionar de forma extraña y mis manos no dejaban de temblar. Estaba descubriendo mis propias emociones y como reacciona mi cuerpo ante ellas.

Durante ese mes asistí religiosamente a las clases, dos por semana y terminando practicaba por horas, a diario, adoptando una disciplina que no tenia con cualquier otra actividad, esta dedicación me dio las armas para enfocarme (o al menos así lo sentí) y sobrevivir a la “terrible” presentación de clausura. Conforme mas presentaciones en vivo fui teniendo con esta rondalla mas autocontrol tenia de estas emociones.

Tiempo después, ahora con el bajo eléctrico como mi instrumento, tuve la oportunidad de tocar con toda clase de músicos de varios géneros y fui aprendiendo cual era mi trabajo como músico y como miembro de un equipo. Escuchar lo que estaba sucediendo en el escenario como detrás de el, escuchar lo que me estaban expresando cada uno de mis compañeros, interpretarlo y responder a esa conversación tanto musical como personal. Y mas aun, como líder de la banda debes de tener la sensibilidad y diplomacia para poder dirigir a un grupo de individuos a trabajar en sintonía. ¡La empatía es esencial para tener un conjunto solido!

Debo admitir que era algo introvertido por aquellos años, pasaba horas encerrado en mi cuarto aprendiendo canciones y salía de vez en cuando a ver presentaciones de bandas locales. Una tarde recibí una llamada de una de esas bandas para tocar con ellos horas antes de su presentación, a partir de ahí se formo mi primera banda de rock cimentada por una gran amistad entre nosotros y no solo eso, de pronto ya era parte de una red de músicos con las mismas afinidades a las mías y sin darme cuenta mis relaciones sociales dieron un gran avance. La música es democrática, no importa la raza, cultura, ideologías, etc
…cuando hay música en común, la sintonía es inevitable.

¿Y que relación tiene todo esto con la Inteligencia emocional? Este término tan usado en los últimos años que no es mas que el entender tus emociones para tener control de ellas, incluso, se considera aun mas importante que la inteligencia cognitiva.

Esta llamada Inteligencia emocional esta fundamentada en 4 pilares:
 Comprender nuestras emociones
 Autorregulación
 Empatía hacia los demás
 Habilidades sociales

Y si…¡Tus deducciones son correctas! Estaba ejercitando estos 4 aspectos durante mi aprendizaje musical y entonces me pregunto… ¿por que a la música no se le da la importancia que se le da a las matemáticas o a las lenguas?, no se trata de formar músicos sino de utilizar la música como recurso para desarrollar estas habilidades.

La humanidad a tenido una evolución tecnológica impresionante, sin embargo, nuestras reacciones como sociedad tanto como individuos frente a conflictos y vicisitudes diarias de la vida son básicamente las mismas con la que reaccionaban nuestros ancestros en el pleistoceno. Es tiempo de abordar esta
problemática y fomentar un modelo académico y educativo que desarrolle nuestro potencial humano.

¡Enseñémosle música a nuestros hijos! Por que a pesar de las dificultades que van a enfrentar, con música e inteligencia emocional tendrán las herramientas para llegar a ser más sabios y felices.